Infinite Dendrogram Volumen 4 Capitulo cinco: Yuri y Hugo


Capitulo Cinco: Yuri y Hugo

Yuri Gautier

Mi nombre es Yuri Gautier. Esta es la historia de mi pasado, y mi presente.

Nací al sur de Francia, para una familia que la mayoría llamaría “clase superior.”

Mi padre era un hombre hecho así mismo de gran riqueza. Mi madre era una ex actriz de teatro, e incluso yo, su niña, podría decir que ella era muy gentil y hermosa. También tuve una hermana mayor, quien era tan inteligente, y buena para me que no podía nunca parar de alardear sobre ella.

Esa era mi familia, y la mayoría de los espectadores ciertamente sugeriría que fui bendecido por haber nacido en tal hogar. Sin embargo, como uno quien había vivido eso, tenía una opinión enteramente diferente.

Aunque mi padre era un genio de los negocios, él era también codicioso, arrogante, y seguido maltrataba a mi madre, quien lo soporto todo mientras intentaba ocultarnos el dolor lo mejor que podía. Podía ver algo similar en mi hermana, también. Aunque ella siempre fue buena conmigo, seguido sentí que ella estaba preocupada por algo.

Claramente recordé los días cuando mi madre me llevo al teatro en el que ella solía actuar antes que se casara. Sus ojos mientras miraban en las obras de teatro no estaba llenos de disfrute o nostalgia – estaban nubladas por el resentimiento.

Podía también recordar ver a mi hermana en su cuarto, claramente preocupada por lo que le depararía el futuro.

Viví mi vida sin cualquier inconveniente de lo que hablar. Mi madre, hermana, e incluso padre todos eran buenos conmigo. El mundo mismo era un lugar gentil para mí. Sin embargo, parecía ponerse gradualmente peor para ambos mi madre y mi hermana.

Esa fue mi vida la mayoría de mi infancia… hasta que mis padres se divorciaron.

Y la razón de porque ellos hicieron eso fue la desaparición de mi hermana.

Ella desapareció sin una pista después de dejar una carta de despedida, y aunque no conseguí leerla, era obvio que ella se había ido por su propia cuenta. Sabia sus razones para hacer eso, y así, mientras lo encontraba triste, no pensé que fuera lo menos extraño.

Hasta hace unos pocos años, mi hermana había estado aprendiendo artes y artesanía de nuestro abuelo materno. Lo que la llevo a esto fue la muerte de Dylan, nuestra iguana mascota.

Nos había puesto a ambas tristes, entonces nuestro abuelo había tratado de animarnos con una figura de yeso hecho a mano que se miraba exactamente como Dylan. Aunque nuestro abuelo no había sido lo suficiente bueno en su artesanía para reconocerlo como artista, mi hermana le había gustado el mero resultado – lo suficiente para tratarlo ella misma mientras nuestro abuelo le enseñaba. Ella continúo haciendo figuras de yeso incluso después que el falleció.

El día antes que ella desapareciera, todas las figuras que ella había hecho habían sido destrozadas, junto con todo lo demás que nuestro abuelo había dejado atrás.

El único quien lo hizo fue nuestro padre.

“¡¿Cuánto tiempo puedes seguir haciendo esto?! ¡Ya estás en un matrimonio arreglado! ¡A él no le gustara el olor que estas cosas hacen!” él había gritado mientras las destrozaba una a una.

De pie ante los pedazos, mi hermana lo miro con los ojos más fríos imaginables, dejo una carta, y simplemente salió caminando.

Mi padre se puso furioso, mientras mi madre libero el resentimiento que ella había estado manteniendo dentro.

“¡Todo esto es porque ella se envolvió con tu padre y este estúpido hobby!” grito mi padre.

“¡No! ¡Todo esto es porque tú nunca consideraste sus sentimientos!” grito mi madre.

Y así, este incidente llevo a la conclusión obvia – divorcio.

Fui dejada al cuidado de mi madre, y las dos nos mudamos a vivir lejos de él. Desde ese momento en adelante, me persiguió cierto pensamiento:

Debí haberlas protegido.

Talvez era una idea infantil, pero verdaderamente creí esas cosas no se habrían vuelto de esta forma si hubiera estado ahí para mi madre y hermana.

Sinceramente desee que pudiera ser alguien capaz de protegerlas, como uno de esos príncipes nobles o caballeros de las obras de teatro a las que mi madre a menudo me llevaba. Pero en ese punto, ya tenía edad suficiente para saber que mi deseo nunca se volvería verdad, entonces bloquee mi deseo lejos dentro de mí.



Sin embargo, unos pocos años después del divorcio, una cierta cosa hizo realidad mi deseo.

Era un juego llamado Infinite Dendrogram.

En su línea promocional, este prometía “proveerte con un nuevo mundo y tu mera propia posibilidad única.”

Yo, Yuri Gautier, entre a este mundo y me volví Hugo Lesseps – un Alto Piloto del imperio de Dryfe.

Hugo era alto y siempre actuaba como un joven hombre noble. Basaba su comportamiento en lo que había aprendido de los juegos que vio, y puso mucho esfuerzo en hacerlo funcionar. También podría haber heredado algo del talento de actuación de mi madre.

Quería a Hugo ser la realización del deseo que había tenido desde que era joven: ser un caballero que protege a las mujeres y derrota cualquier tragedia amenazándolas. Desee por mi papel como Hugo de ser una espina de flor hermosa.

Si no hubiera caballeros ahí para proteger a las mujeres de la tragedia, me volvería en uno yo misma.

Ese deseo mío podría haber sido deformado, pero continuaría jugando este rol por el entero mes – o tres meses en el tiempo de juego – desde que había comenzado Infinite Dendrogram.

Pero ahora, me había vuelto parte de un plan el cual me forzaba a descartar mi rol.

El plan era el resultado de cooperación entre el Triangle of Wisdom y la facción del primer ministro del Imperio de Dryfe.

Era un proyecto a gran escala que cubría la cuidad entera de Gideon, trayendo tragedia a las personas inocentes viviendo ahí. Este incluso envolvía el secuestro de una princesa.

Normalmente, Hugo – el símbolo de mi ideal – habría evitado participar en el proyecto incluso su esto significaba dejar el clan, pero tenía dos razones de porque simplemente tenía que involucrarme.

La primer era el hecho que el éxito de este plan reduciría grandemente el número de víctimas a largo plazo. Si esto causaba al reino rendirse, la guerra entre este y el imperio terminaría sin ninguna matanza más. Si este plan no terminara al reino, las vidas perdidas en las entrantes batallas serian numerosas. Después de todo, cerca de la mitad del Imperio realmente deseaba porque eso pasara.

El país se dividió en dos, o más bien, tres facciones: La facción del primer ministro, la facción de Field Marshall, y la facción Imperator.

Nota: imperator es algo así como un comandante, un título dado por la republica a un victorioso comandante o algo así.

El Primer ministro Vigoma era responsable por los asuntos internos del país, y él estaba profundamente preocupado por la caída del poder nacional debido a el dinero que gastaron en la previa guerra. Antes, el imperio se había vuelto loco gastando dinero para comprar tantos Maestros como fuera posible. Eso había resultado en la victoria de Dryfe, pero ciertamente esto no había sido bueno para la finanza pública. Sin mencionar que el reino permaneció invicto, lo que significó que el imperio había conseguido menos de lo que había pagado.

Y con la barra ahora siendo colocada, la recompensa podría ser reducida. Si Dryfe fuera a hacer eso, los Maestros estarían tan disgustados como los Maestros del reino había estado cuando no se les había ofrecido nada, lo cual resultaría en una significativa caída en participantes. Sin embargo, una recompensa como antes podría solo ser preparada una vez más, e incluso si Dryfe terminara ganando, el estado de finanzas publicas seria horrible.

Por lo tanto, la facción del primer ministro había preparado este plan para el propósito de terminar la guerra antes de que esta pudiera empezar. El Triangle of Wisdom se había vuelto parte de ello porque el imperio era su patrocinador y no querían que su economía se quebrara.

La facción lidereada por uno a cargo de la armada, Field Marshall Barbaros, tenía una opinión diferente sobre lo que sería mejor.

Era completamente cierto que la guerra no terminaría con solo el reino y Legendaria o Caldina se convertiría en los nuevos enemigos de Dryfe. Por otro lado, el creía que el mejor curso de acción era para demostrar el poderío y destreza militar del Imperio mientras se presumen las grandes recompensas que el país podría dar a sus Maestros.

Con eso, Dryfe atraería a nuevos Maestros y, en cambio, incrementar el potencial de batalla, desanimando a países como Caldina de atacarlos. El Fiel Marshall también creía que el dinero gastado podría compensarse con el tesoro nacional del reino.

El único tomando su lado era el líder de la armada demoniaca: Hell General (Infierno General), Logan Goddhart. Pero él era meramente un hombre quien quería peleas donde el pudiera alardear, entonces lo que le interesaba más eran los métodos, más que el objetivo.

Esas dos ideas habían desgarrado al país por la mitad.

La tercera facción era la única liderada por el Imperator mismo. Sin embargo, esta facción no parecía tener alguna idea solida de acuerdo a la situación, o comentarios sobre las otras dos facciones, entonces eso solo servía para polarizar al país aún más.

“El Imperator no le importa cual facción gane esto,” dijo mi líder de clan. “Para el, lo que importa no es el proceso del resultado, si no el objetivo.”

No sabía lo que él quería decir por eso, pero eventualmente, las dos facciones habían llegado a un acuerdo.

La facción del primer ministro iría primero, y si su complot funcionaba y terminaba con la anexión del reino, la facción del Fiel Marshall aceptaría los resultados. Sin embargo, si esta fallaba y la guerra continuaba, el Field Marshall conseguiría todos los derechos para reiniciar la invasión.

Si eso pasaba, entonces el reino seguramente sufriría. Incluso si Dryfe ganaba, probablemente no pararían y matarían solo la armada o a los Maestros. Era enteramente posible que el reino perdería más de lo que perderían durante el plan.

Por otro lado, había escogido entre una tragedia en el presente o una calamidad en el futuro.

Escogí la primera.

El plan habría pasado incluso si no hubiera sido envuelto, entonces me uní con la intención de incrementar su rango de éxito y terminando todo aquí y ahora. Esa era la primera razón de porque había participado en el plan.

La segunda razón era extremadamente personal en comparación.

Mientras la primera razón estaba basada en mi rol como Hugo, la segunda razón era completamente propia.

Era porque respetaba grandemente la mente principal detrás del plan, el único más conocido en Infinite Dendrogram como “Mr. Franklin.”

“El” era quien me había ayudado cuando comencé. Sin mencionar que yo misma quería estar al lado de Franklin y darle la ayuda que el necesitaba.

Mis propios sentimientos eran la mitad de la razón porque estaba de pie aquí como una de las principales partes del plan.

Eso significaba que, mientras la mitad de mi razón por ser envuelto en esta tragedia era obligatoria, la otra mitad no era nada sino mi propio ego. Este hecho me molesto mucho.

Entonces el vino a mí y me prometió que los asesinos de jugadores y los monstruos solo atacarían Maestros.

Los monstruos estaban diseñados de una forma que limitaba sus objetivos a Maestros, mientras los asesinos de jugadores no irían por tians porque no querían entrar en la lista de buscados. Con esos hechos, el prometió que la perdida de vida de los tians se reduciría enormemente.

Para el, el daño hecho a tians no importaba mucho, sin embargo, prometió esto a mí por consideración por mis sentimientos. A causa de esto, había decidido creerle y hacer lo mejor para hacer del plan un éxito y para prevenir la calamidad de pasar.

Por el motivo de estar en su lado y porque de la confianza entre nosotros, Yo – Hugo Lesseps el caballero máquina de hielo y rosas – se había vuelto un engrane en este incidente.



Y así llego el día del plan. Comenzó en el momento que el duelo en la arena central entre Figaro y Xunyu alcanzo su conclusión.

Los asesinos de jugadores en Gideon comenzaron cazando Maestros mientras los pocos monstruos liberados comenzaron destruyendo la ciudad.

Para sacar mi mente de toda agitación, cerré mis ojos y silenciosamente me senté en el asiento del Marshall II R que él me había dado.

Cerca de diez minutos después el plan comenzó, escuche el sonido de pesuñas galopando sobre el pavimento. Entonces hubo voces.

“¡Ese es un Magingear de Dryfe!”

“¡Esta ahí para detenernos de salvar a Su Alteza!”

Había bastante distancia entre nosotros, pero podía escuchar los contenidos de su conversación debido a una de las habilidades del Marshall II R: Sound Collection (Recolección de Sonido).

Miré a través del monitor mostrando la salida de la cámara del ojo y vi que había Paladines de la Guardia Real. Todos en ese grupo era una persona de este mundo, no un Maestro. Por otro lado, ellos no eran mis objetivos.

Moví el brazo del Marshall II R y apunté a la señal que había colocado antes de que el plan comenzara.

“‘Ningún Maestro pasara más allá de este punto…’ eso significa que podemos, ¿sí?” pregunto una mujer revestida en una armadura ostentosa de blanco puro.

De acuerdo a la información que me habían dado, estaba mirando a la Vice Comandante de la Guardia Real, Liliana Grandria. Ella era exactamente la misma persona a quien le había explicado la situación ayer después de llevar a los niños que habíamos salvado de la pandilla Gouz-Maise.

“Mh…” sin decir nada, hice a mi robot asentir y moverse a un lado, dejándolos pasar a través de la puerta.

“Muy bien,” ella dijo. “Entonces deberíamos pasar y esperar por Franklin en los Jeand Grasslands.”

“¡Lady Grandria!” grito uno de sus subordinaos. “¡¿Realmente podemos dejar este Magingear aquí?!”

“Pelear en la ciudad nos pone en desventaja, sin mencionar que seriamos atrapados entre este Magingear y Franklin, una vez llegue,” Liliana le dijo. “Además, este Magingear es lo suficiente fuerte para ser ordenado de enfrentar a todos los Maestros de Gideon por el solo. Incluso si emergemos victoriosos contra tal enemigo, probablemente no tendríamos la fuerza suficiente para salvar a Su Alteza.”

“…Entendido.”

Después de ese intercambio, la Guardia Real comenzó yendo hacia la puerta mientras pasaban por mi lado. Algunos eran cautelosos de un potencial ataque sorpresa, algunos estaban tensos, mientras otros me miraban con nada mas sino odio en sus ojos.

Este trato no era inesperado. Sabia y ya había aceptado el hecho que estaba haciendo algo valido de tales reacciones.

Al final de su unidad estaba Liliana misma.

Antes de pasar a través de la puerta, ella paro al lado de mi Marshall II R y comenzó a hablar. “Eres la misma persona quien ayudo a Ray a salvar a los niños de la pandilla Gouz-Maise, ¿sí?”

Aunque no había dicho una palabra, ella de algún modo sabía quién era. No podía empezar a entender lo que lo había dado a entender, pero de algún modo fui capaz de esconder mi perplejidad.

“Tienes mis más sinceras gracias por eso,” ella continuo. “También, como yo misma, más que la cabeza de la Guardia Real, tengo otra cosa que decir…”

Ella momentáneamente guardo silencio y miro en el ojo de la cámara de mi Magingear, mirándome a través del monitor antes de continuar.

“Por favor no molestes a Ray.”

Incapaz de decir nada como respuesta, meramente me incline ligeramente.

La Guardia Real paso la puerta oeste y comenzó preparando su formación para “su” llegada en los Jeand Grasslands.

Aunque no podía evitar imaginar lo que pasaría a ellos en la pelea, no podía hacer nada sino darme la vuelta.

Franklin llego justo después de que me hice cargo de los Maestros que siguieron a la Guardia Real. Él me dijo deja a Ray Starling pasar, diciendo que él quería hacerse cargo de el por sí mismo.

Imagine que sería el único quien pelearía con Ray. Ya le había dicho que “Es oeste.” Si, en el momento en que el plan comenzara, el recordaba el nombre del clan del cual yo era parte, él ciertamente se daría cuenta que no había más para mi diciendo eso.

La razón porque había dicho eso a él era mi propia duda. Un simple día con el cómo mi compañero había sido suficiente para saber que él era como yo – una persona quien no podía tolerar las tragedias y considerar las vidas en este mundo valiosas tanto como esas en la tierra.

En este plan, escogí ser el que provoca la tragedia, y había revelado parte de la trama a él exactamente porque sabía que el trataría de detenerla, aunque era parte de la tragedia, sentí suficiente culpa para tratar y ayudar a pararla.



Había encomendado mi duda – mi deseo de para la tragedia – a él.


Lo había hecho la representación de esos sentimientos, para ver cual lado ganaría.

Era completamente consciente que esto era muy parecido a usarlo como un lanzamiento de moneda. Lo que había hecho estaba deformado, egoísta, y repugnante, pero era algo que solo no podía evitar hacer.

Después de hablar conmigo, Franklin paso a la puerta oeste y salió. No sería mucho hasta que él comience a pelear con la Guardia Real.

Mirando lejos de eso, trate lo mejor para ignorar el inevitable resultado de su batalla.

Poco después, él finalmente llego.

◇◇◇

Paladín, Ray Starling

La mejor palabra para describir la escena ante mí era “infernal.”

Las esculturas de hielo principales esparcidas por sobre todo el pavimento lo hacía de algún modo recordatorio de un festival de nieve al que había ido cuando era un pequeño, pero el hecho que realmente había personas solidas congeladas hizo que mi reacción estuviera muy lejos de la alegría que había sentido en aquel entonces.

Todos ellos tenían crestas sobre el torso de sus manos izquierdas, significando que eran Maestros, así como yo. Normalmente, la vista me habría dejado sentido nada más que miedo. Sin embargo, había visto un humanoide congelado de esta forma justamente ayer, entonces tenía la capacidad para otros sentimientos.

Sin palabras, mire a la señal cercana.

“¿‘Ningún Maestro pasara más allá de este punto’?” Nemesis leyó, su voz resonó en mi mente. “Considero esto es una advertencia.”

Mas probable. Y supongo que las estatuas de hielo son lo que se volvió de los Maestros quienes ignoraron esto, pensé.

Aun, una parte de mi creía que esta no era una advertencia. Sentí como si esto cargara el significado de “no puedo y no dejare pasar, así por favor, mantente alejado.” Sin embargo, yo podría solo estar viéndola de esa forma porque conocía al único quien había creado el infierno ante mí.

El significado de esta señal contradice su invitación aquí, pero tengo un sentimiento de que él era completamente consciente de eso.

“¿Querías que viniera o no… Hugo?” lo llame.

“…No estoy seguro sobre eso yo mismo, Ray.” En medio del inferno de pie en una estructura mecánica, casi cinco metros de altura y revestido en armadura de escarcha blanca azulada. Cada una de sus manos sosteniendo cuchillas de hielo que recuerda a las cruces.

La entidad portando la apariencia general de una iglesia de hielo era ningún otro que el Embrión Tipo Doncella/Carruaje conocido como Cocytus, mientras su Maestro era el hombre con quien había derrotado la pandilla Gouz-Maise, Hugo Lesseps. Él y yo nos habíamos encontrado de nuevo en la tarde de este día y nos separamos en buenos términos.

Su tono ahora era muy diferente comparado a antes o ayer. Como pensé parecía que se sentía muy acorralado.

“¿Dónde está Franklin… tu líder de clan?” pregunte.

“Mas allá de la puerta,” el respondió. “Justo ahora, él está… peleando con la Guardia Real.”

“¡Hn…!”

¿Las personas de Liliana están peleando contra él? Pensé.

Eso ciertamente no era inesperado. Franklin había raptado a la princesa, entonces era solo obvio para ellos enfrentarlo. Si esto significaba proteger lo que era querido para ella, Liliana ignoraría los peligros, no importa que tan grandes ellos fueran. Había conocido esa parte de su carácter desde mi primer día en Infinite Dendrogram.

“Si así es como esto es, estaremos pasando a través,” dije.

“Puedes pasar, pero no puedo decir lo mismo de tus amigos,” él dijo mientras hacia su Magingear apuntar a Rook y las tres chicas detrás de mí. “Ese es mi rol en esto.”

Espera… “¿Puedes pasar?” ¿Qué? Pensé. “¿Por qué estoy yo permitido?”

“No fui quien decidió eso. “El…” el jefe… quiere pelear contigo por el mismo.”

Estaba asombrado. Franklin quería pelear… ¿conmigo? Pero la única unión entre nosotros es la medicina de orejas de perro que el me dio ayer. Sin mencionar que soy un novato y hay muchas personas más fuertes que yo, entonces… ¿Por qué está llamándome a mí?

“¿Por qué?” pregunte.

Hugo no dijo nada. Talvez ni siquiera él sabía la razón.

“…Lo que importa aquí es que tú puedes pasar,” el hablo. “Si deseas pararlo y salvar a la princesa… entonces ve.”

Hugo entonces se movió al lado, aclarando el camino para mí.

Si sigo adelante, significaría dejar a Rook y los otros detrás, no sin mencionar eso.

“Ve adelante, Ray,” dijo Rook, como si el supiera lo que estaba pensando. Por supuesto, el probablemente lo sabía, y eso era exactamente porque lo había dicho.

“Estas preocupado por dos cosas a la vez… ¿Por qué está pasando más allá de las puertas, sí?” el continuo. “Entonces deberías darte prisa e ir. Peleare con esta persona en tu lugar.”

“Rook…”

El claramente sabia las preguntas que me preocupaban justo ahora: “Realmente debería seguir adelante y dejar a Rook y las chicas aquí” y “¿Puedo ignorar a Hugo mientras él está en tal inestable estado?”

“Es obvio que este es el amigo quien peleo a tu lado ayer,” el continuo. Miro directamente en mí. “Entiendo que te estas preguntando, porque él está tomando parte en esto, y puedo decir que quieres hablar con él. Y es exactamente porque puedo ver eso que estoy diciendo que deberías seguir adelante. Si no lo haces a tiempo, seguramente te lamentaras siempre. Eso es porque estoy sugiriendo que vayas tras Franklin.”

“…Gracias, Rook… te lo dejo a ti,” dije.

“¡Puedes contar conmigo!” el contesto mientras yo agarraba las riendas de Silver y me daba la vuelta a la puerta.

Mientras enfrentaba el infierno congelado ante mí, estaba un poco preocupado de que fuera congelado como el resto, pero tras entrar, me di cuenta que mis preocupaciones eran innecesarias, porque ni siquiera me hizo sentir un poco de frio.

Y así, monte a Silver hacia la puerta, pero entonces…

…el robot de Hugo se movió para bloquear el camino.

“Hugo,” dije.

“…Ray,” el hablo a través de los parlantes con una voz sin certeza, como si estuviera exprimiéndolo después de haber dudado tanto.

Siguiéndole un corto silencio, durante el cual él estaba probablemente pensando sobre si el debería decirlo o no, Hugo continuo sus palabras.

“Lo siento por retirar mi palabra… ¿pero podrías pelear conmigo? Solo un intercambio de ataques al máximo lo hará.”

No sabía lo que pasaba en su mente, y no podía decir porque él había decidido decir eso, pero no me tomo mucho darle una respuesta.

“Está bien.” Asentí y blandí a Nemesis en su forma de gran espada negra. “Tengo muchas preguntas para hacer y muchas cosas por decirte, pero por ahora, lo dejare con solo un ataque cada uno.”

“…Merci (Gracias),” él dijo mientras yo y su robot de pie frente uno al otro.

Hay cerca de 15 metros entre nosotros. Conmigo estando ensillado sobre Silver y Hugo montando su Magingear, esa distancia podría bien no haber estado ahí.

Instantáneamente comencé a cargar hacia él, tratando de pasar al lado de su Magingear.

“¡Motor Slash (Cuchillada Motriz)!” grito la voz de los parlantes mientras el robot balanceo su cuchilla tipo cruz derecha hacia mí con toda la velocidad este pudo reunir.

Los Magingear habían dicho ser del nivel Demi-Dragon, y ese era un ataque producido con todo el poder y peso de la máquina. Me amenazo más que la carga de un Demi-Dragon, y podía decir que fácilmente me partiría por la mitad si aterrizaba.

“¡Counter absorption!” Nemesis exclamo, previniendo de que eso pasara con su barrera de luz.

“¡Vengueance is Mine!” agregue, siguiéndolo con un contrataque de mi hoja. Eso destrozo la armadura congelada del Magingear y doblo su armazón interior.

Y con ese simple intercambio de golpes, la batalla fue terminada y habíamos cambiado posiciones.

Con mi espalda dirigida hacia él, cargue hacia las afueras de la puerta, encomendándolo a mi amigo… para otro amigo.

◆◆◆

Miembro de Triangle of Wisdom, Alto Piloto, Hugo Lesseps

Después de nuestra momentánea batalla, mire como Ray se dirigía afuera hacia la puerta.

La batalla había terminado con Ray quedando ileso y el brazo derecho de mi Marshall II R siendo significativamente dañado. Si eso era todo lo que tenía que ser considerado, hubiera sido mi perdida. Sin embargo, había solo tomado algo importante de él…

“Entonces él la uso…” murmure.

Counter Absorption.

Era una habilidad defensiva única de Nemesis. Aunque inmensamente poderosa, Ray me había dicho que tenía un numero de usos. Si se hubiera agotado durante su batalla contra Gouz-Maise, la cantidad que él había reabastecido por ahora era uno. Y yo lo había hecho usarlo en mí.

Para Ray, quien estaba cerca de pelear con “él”, esto era un grillete que él no podía ignorar. Hubiera preguntado a Ray para ir con todo porque creí que haría exactamente eso.

Lo que había hecho justo ahora era nada mas sino traición de un amigo quien – si solo por un día – había peleado a mi lado. Lo había enviado a una muerte segura e incluso corte su única línea de vida.

Aunque era una elección amarga para mí por hacer, la había hecho sin importar.

Después de todo, simplemente no querer dejar pasar a “su” enemigo.

No había sido capaz de permanecer fuera de esto con Ray dirigiéndose a ahí con un espíritu de hacer o morir y resolución infinita. Era algo que había hecho porque había tratado de cargar con todo – mis emociones, mis pecados, y mi rol como un cómplice.

Oh… enserio… ¿Por qué soy tan…?

“Para ti, eso era… ¡¿Nh?!” Cyco hablo, pero antes que ella pudiera terminar, un simple impacto interrumpió sus palabras.

Esto fue causado por un ataque cargado de el Tri-Horn Demi-Dragon y ataques adicionales del Maestro montándolo – el amigo de Ray.

“Discúlpame,” él dijo. “Pasaste a estar lleno de aperturas.”

Mientras trataba de fijar la postura de mi estructura, el Maestro, su Tri-Horn, y la súcubo – presumiblemente su Embrión – continuo la barrera. No había vacilación o misericordia en sus ataques, haciéndolo evidente que él lo hubiera terminado con este único ataque sorpresa si lo hubiera permitido.

“Eres tan injusto,” dijo Cyco.

“Ahora eso está fuera de lugar,” el contesto. “Ya dije que sería con el que pelearías. No es mi culpa que te hayas perdido en ello.”

“Heh heh,” me reí entre dientes. “Para alguien quien parece ser amigo de Ray, eres ciertamente diferente de él.”

Mientras Ray era de algún modo irracional, sin tacto, y de una sola cara, este chico aquí era lógico y calculador hasta el núcleo.

La expresión que él me estaba dando no era nada como la que le había dado a Ray. Era fría, y la falta de incluso una pista de sonrisa, combinada con su rostro bien estructurado, lo hizo algo aterrador.

Sentí que estaba afinando la impresión que él le daba a otras personas, mucho como lo que hice cuando jugué el rol de caballero. Sin embargo, su máscara parecía ser mucho más densa que la mía.

“Talvez,” él dijo. “Eso podría ser porque respeto mucho a Ray. Ah, eso de lado…”

Aun sentado sobre la espalda del Demi-Dragon, el Maestro, Rook, me miro con algunos de los ojos más fríos que alguna vez he visto… mucho como los que mi hermana tenía en ese fatídico día.

“…Creo que te odio,” el continuo, sus palabras me desconcertaron sin fin.

Sound Collection entonces recogió la súcubo – probablemente su Embrión – murmurando, “Esa es la primera vez que Rook le dice eso a alguien.”

“…Heh,” me reí entre dientes. “Odiar en el primer encuentro. Ahora eso es algo.”

“Talvez lo es,” el contesto. “Pero simplemente eres repugnante. Eres tan indeciso y engreído que me recuerdas a cierta persona.”

“Tonterías incomprensibles...”

“¿Realmente lo son?” su murada tenía suficiente poder para hacerme saber que él estaba absolutamente seguro de algo. Se sentía como si él fuera consciente de que había evitado mis ojos en muchas cosas y no podía ser determinado sobre nada.

“…No tengo idea lo que quieres decir,” dije. “A pesar de todo, tengo que congelarte donde estas de pie.”

Fije la postura de mi máquina, golpee al Tri-Horn con mi armadura, e hice alguna distancia entre nosotros.

“No puedo permitir a cualquier Maestro además de ‘el’ y Ray pasar aquí,” continúe. “Como un miembro del Triangle of Wisdom y como una espina protegiéndolo… debería dar mi todo en esta batalla.”

“Muy bien,” el contesto. “Entonces usare todo lo que tengo para derrotarte y pasar. Hare esto como amigo de Ray… y como yo mismo.”

De pie sobre el Demi-Dragon con la súcubos a su lado, el me enfrento.

Después de un momentáneo silencio y un intercambio de miradas, finalmente hable. “Alto Piloto: Hugo Lesseps, y Embrión: Cocytus.”

Este era un ritual. Derrotaría al amigo de Ray y evitar que logre su objetivo. Este era un ritual para este propósito… y un “duelo.”

“Proxeneta: Rook Holmes, Embrión: Babylon, y secuaces: Marilyn y Audrey.” El respondió de la misma forma.

“Podría la pelea…” dije antes de tomar un respiro.

“… ¡Comenzar!” ambos declaramos.

El duelo había comenzado.

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